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viernes, 24 de abril de 2009

PARASHA HASHAVUA por Rav Peter Tarlow


La parashá para esta semana es una parashá doble. No son nada fáciles leer y mucha gente preferiría evitarlas. La primera se llama Tazriá (Levítico 12:1-13:59) y la segunda se llama Mtzorá (Levítico 14:1-15:32). Las dos tratan de una enfermedad que la Biblia llama "tzara'at". Muchas veces se la mal traduce como la lepra. Su derivación significa "una mala lástima." De hecho, se ignora exactamente la enfermedad a la cual se refiere. La Biblia habla del tratamiento que se da a una persona sufriendo de esta enfermedad y muchos se preguntan si en un mundo de medicina moderna si estas dos secciones semanales todavía son relevantes a nuestra vida. Hay los que dicen que tal vez sería mejor simplemente omitirlas.


Hay otras interpretaciones de esta enfermedad. Podremos verla no como una enfermedad que toca al individuo (el nivel de micro) sino a una sociedad entera (el nivel de macro). Por ejemplo, esta semana no solamente conmemoramos Iom Ha'Shoá (El Día de Recordar a los Víctimas del Holocausto europeo) sino vimos el racismo bien vivo en el disfraz de un congreso de la ONU sobre, irónicamente, el racismo. Realizado en Ginebra, la ONU dio la palabra al presidente de Irán, un negador del Holocausto y alguien que desea continuar con el trabajo de Hitler. Vimos al Secretario General escucharlo dar su odio y al presidente de Suiza usar el pretexto de la neutralidad para recibirlo. (Al crédito del mundo occidental la mayor parte de los países europeos y americanos se fueron cuando el presidente de Irán hablaba). Hay que preguntarse si la neutralidad de maldad y de desgracia suiza no es la misma que los suizos practicaban para prevenir a los refugiados judíos huir de los hornos alemanes y para robarles de su bienes.


Al leer las noticias tristes de Europa notamos que la enfermedad de tzara'at puede ser una metáfora por la enfermedad social que ha impactado la humanidad por casi toda su historia. En hebreo esta enfermedad se llama "sinat jinam" o "el odio sin razón; odiar sin base y sin lógica, el odiar por odiar." Este es un odio que se aprende en la juventud, es el odio que rezuma de la tierra e infecta la sociedad hasta que resulte en una de las grandes tragedias históricas. Como la "tzara'at", el odio consume las bases de una sociedad. Infelizmente ha existido y sigue existiendo en muchas partes del mundo. Lo vimos en el Holocausto europeo, en el anti-semitismo de Irán, y hasta en el odio que el presidente del Brasil ha expresado contra los de ojos azules. Es una enfermedad que entra en el alma del pueblo y lo destruye del dentro para afuera. Por fin destruye tanto al victima como el que ha perpetuado la orgía de odio.


Es posible que estas secciones semanales nos hablen de locura del odio, el odio que ha provocado las muchas tragedias europeas como la inquisición y el holocausto, las tragedias en la Africa, la esclavitud del negro y el genocidio contra los indígenas american0s. Quizás el propósito de esta parashá no es para enseñarnos sobre una enfermedad que ya no existe sino sobre una que sí aún existe. Nos enseña que al introducir el odio en una sociedad, en la misma manera que la lepra consume el cuerpo humano, el odio consume el cuerpo ético de una sociedad. Estas dos secciones nos hacen preguntar si de veras hemos absorbido el horror de la Inquisición española y portuguesa y del Holocausto que consumió casi toda Europa. ¿No son las diatribas del presidente de Irán contra Israel o las del presidente del Brasil contra los de ojos azules símbolos de que es más fácil encontrar un chivo expiatorio que resolver un problema? ¿Todavía odiamos el otro y le culpamos por nuestros propios fallos? ¿Enseñamos a nuestros hijos a amar en lugar de odiar? Tal vez en lugar de omitir estas dos secciones necesitamos estudiarlas en forma detallada. ¿Qué opinan Uds.??




Rav Peter Tarlow es el rabino de Oneg Shabat, y director de la casa de Hillel de la Universidad de Texas A&M